28 de noviembre de 2010

De la cabeza de la Gata, Estudiantes se llevó tres puntos fundamentales

En un partido trascendental en la lucha por el Torneo Apertura, Estudiantes superó como visitante a Independiente por 2 a 1 y le sacó cinco puntos de distancia a su más inmediato perseguidor, Vélez. Juan Pablo Pereyra puso en ventaja al conjunto de La Plata, luego Nicolás Martínez colocó la igualdad y, a falta de cinco minutos para el cierre, Gastón Fernández le dio la victoria al Pincha, que sueña cada vez más con el título.

                       La Gata grita su gol de cara a los hinchas de Independiente

Por Matías Orciuoli
maty7_4@hotmail.com

Con el objetivo primordial de defender la punta, el técnico Alejandro Sabella dispuso dos modificaciones con respecto a los once que vencieron a Huracán el fin de semana pasado: Juan Pablo Pereyra substituyó al joven estadounidense Michael Hoyos, mientras que Leandro Desábato –ya recuperado de su lesión- volvió a la titularidad en lugar de Facundo Roncaglia.

Por su parte, el elenco de Avellaneda dispuso de una alineación completamente alternativa debido a que a mediados de semana, jugará el encuentro de ida por la final de la Copa Sudamericana ante Goiás, en Brasil.


Durante los primeros minutos del cotejo, Independiente administró mejor la pelota que su rival, se mostró con mayor seguridad a la hora de ensayar jugadas en campo contrario e incluso generó peligro mediante un remate desde fuera del área por parte de Leandro Gracián que el arquero Agustín Orion no pudo controlar y su compañero, Federico Fernández debió enviarla al córner, cuando aparecía para empujarla el juvenil Brian Nieva.

En cambio, Estudiantes, que no había generado riesgos en la valla contraria, se encontró a los once minutos con un mal rechazo del defensor Carlos Matheu  -cuando era presionado por Enzo Pérez- que se la dejó servida a Pereyra para que el ex hombre de Atlético Tucumán defina, ante un arco vacío por la salida en falso de Adrián Gabbarini y decrete el triunfo parcial.

A partir de allí, el combinado de La Plata comenzó a controlar las acciones del juego, principalmente en los pies de Juan Sebastián Verón, y se acomodó en el terreno, algo que hasta el tanto inicial no había conseguido. Además, pudo haber aumentado la diferencia por intermedio de Gabriel Mercado -gracias a una buena asistencia de Gastón Fernández- pero definió sin dirección.

Con el correr de los minutos, los dirigidos por Antonio Mohamed se adelantaron en la cancha para intentar complicar lo que hasta ese momento era una victoria tranquila para el Pincha y estuvieron a punto de lograrlo merced a un gran derechazo desde treinta metros ejecutado por Cristian Pellerano, que se estrelló contra el ángulo izquierdo, ante el esfuerzo de Orión que no alcanzaba a desviar el balón.

El partido disminuyó en intensidad y careció de oportunidades netas de gol, debido a la soledad de Fernández en el ataque visitante y a la poca claridad de los jugadores del Rojo que se obnubilaban en los últimos metros. Sobre el final de la etapa inicial, en primera ocasión Gracián realizó una buena maniobra individual, cuyo disparo acabó en las manos de un seguro Orión y, a continuación, Nieva ingresó al área por el extremo izquierdo, pero al enganchar envió su remate lejos de la portería.

De esta manera, se consumieron los primeros 45 minutos y Estudiantes se fue al descanso con un resultado tranquilizador para intentar afrontar la segunda etapa sin mayores sobresaltos.

                     Los jugadores del Rojo celebran el empate. Verón, lo padece

Sin embargo, antes de empezar el complemento, el técnico de Independiente decretó el ingreso de Patricio Rodríguez, en reemplazo del delantero Germán Pacheco que tuvo una actuación discreta mientras estuvo en cancha. Esta variante resultó determinante para el posterior desarrollo del partido.

Justamente el número “10”, en su primera intervención, describió una buena maniobra para habilitar a Iván Pérez, éste metió un centro a ras del suelo para el ingreso en carrera de Nicolás Martínez y el hermano del Burrito, venció la resistencia del arquero y decretó la igualdad, cuando recién se jugaban treinta segundos de la segunda mitad.

La conversión del volante cambió radicalmente el encuentro, ya que apoyado en las gambetas y corridas de Rodríguez y en las continuas recuperaciones de Pellerano en la mitad de la cancha, el equipo de Avellaneda comenzó a hacerse dueño del juego y estuvo cerca de dar vuelta el marcador con un disparo del recientemente ingresado que se marchó apenas arriba del travesaño.

Estudiantes perdió su orden característico y le costaba demasiado acercarse al arco defendido por Gabbarini. Recién a los 25 minutos, Pérez logró sacarse dos marcadores de encima y soltó un tiro que fue controlado en dos tiempos por el portero, pero aún así, el conjunto platense no encontraba los caminos para desarmar a una defensa que se mostraba segura.

Ante la desesperación de su rival, Independiente entablaba jugadas a puro toque y hacía delirar al público presente en el estadio Libertadores de América.

Los intentos del Pincha y la posibilidad de sacar mayores ventajas en la cima del campeonato se esfumaban, pero, para alegría de los tres mil hinchas que se acercaron hasta Avellaneda, apareció Gastón Fernández: el ataque se inició en el costado derecho, donde Hernán Rodrigo López –que había ingresado minutos antes- colocó un gran centro para la aparición del rubio delantero, quien con un gran cabezazo por encima del esfuerzo de Gabbarini, desató su festejo de cara a los simpatizantes del local.

                             Fernández debió retirarse del campo custodiado

Esta celebración provocó la inmediata reacción de la gente que no escatimó en arrojarle todo tipo de objetos y, más aún, cuando se enteraron que abandonaba el terreno para dejarle su lugar a Matías Sánchez. El ex jugador de San Lorenzo y River debió ser escoltado por efectivos de la policía hasta la manga, bajo una lluvia de insultos.

A partir de lo ocurrido, el árbitro Saúl Laverni decidió agregar seis minutos al tiempo reglamentario, en los cuales los dueños de casa buscaron el empate de todas las formas posibles, aunque la defensa visitante se mantuvo firme y pudo sostener un triunfo vital en su lucha por conquistar el campeonato.

En la próxima fecha, Estudiantes será local de Argentinos en el estadio Centenario de Quilmes con el objetivo de mantenerse en lo más alto de las posiciones, mientras que Independiente tiene la mente puesta en su próximo compromiso ante Goiás, en Brasil para aumentar sus chances de consagrarse a nivel continental.

Datos del partido:

Independiente: Adrián Gabbarini; Samuel Cáceres, Carlos Matheu, Ignacio Barcia, Gabriel Vallés; Cristian Pellerano, Iván Pérez, Nicolás Martínez; Leandro Gracián; Germán Pacheco y Brian Nieva.

Estudiantes: Agustín Orión; Federico Fernández, Leandro Desábato, Germán Ré, Gabriel Mercado; Rodrigo Braña, Juan Sebastián Verón, Marcos Rojo, Enzo Pérez; Juan Pablo Pereyra y Gastón Fernández.

Gol en el primer tiempo: 11’ Juan Pablo Pereyra (E).

Goles en el segundo tiempo: 30’’ Nicolás Martínez (I) y 40’ Gastón Fernández (E).

Cambios en el segundo tiempo: en el inicio Patricio Rodríguez por Germán Pacheco (I) y Leandro Benítez por Juan Pablo Pereyra (E), 22’ Nicolás Delmonte por Brian Nieva (I), 31’ Hernán López por Gabriel Mercado (E), 36’ Lucas Kruspzky por Cristian Pellerano (I) y 45’ Matías Sánchez por Gastón Fernández (E).

Amonestados: Enzo Pérez, Juan Pablo Pereyra, Rodrigo Braña, Hernán López y Gastón Fernández (E).

Expulsado: Enzo Pérez (E).

Árbitro: Saúl Laverni.

Cancha: Independiente.

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